¿DÓNDE SE ORIGINA LA VIOLENCIA?

Comúnmente se han utilizado para interpretar la violencia masculina una serie de argumentos con los que de manera sutil vamos justificándoles, como resultado de los estudios de género impulsados por la academia feminista, se ha llegado a evidenciar las formas de violencia en contra de las mujeres y que los principales agresores de estas son hombres que establecen algún tipo de relación con ellas. Sin embargo, en la cotidianidad la población masculina seguimos sin reconocer la parte que nos corresponde del problema.

Con los índices de violencia que existen en el estado de Veracruz y sin olvidar que seguimos siendo el único estado en el país que cuenta con dos declaratorias de Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres (AVGM), es necesario que exista un involucramiento de los hombres en esta problemática, más desde la construcción de propuestas de solución, para ello es importante que sepamos a ciencia cierta qué es lo que debemos hacer.

Primeramente, debemos voltear la mirada hacia las formas cotidianas que tenemos para socializar e ir construyendo nuestra identidad puesto que es ahí donde se originan muchas de las ideas y creencias en las que los hombres sustentamos nuestra esencia masculina, esto debe tener un doble propósito, primeramente, se abre una oportunidad para el desarrollo de intervenciones que busquen transformar la realidad de las personas, de manera directa para los hombres e indirectamente a las mujeres y en segundo, poder identificar los elementos que contribuyen a la justificación y uso de la violencia hacia las mujeres con la finalidad de generar cambios que favorezcan transitar a sociedades igualitarias, basadas en el respeto y la igualdad.

Uno de los retos que afrontamos quienes estamos trabajando con población masculina, es llegar a la mayoría de hombres, tarea poco sencilla si tomamos en cuenta que existe una diversidad hacia el interior de esta población, nuestras estrategias de atención deben estar encaminadas para desarrollarse en los diferentes espacios en los que de manera “tradicional” confluimos los hombres, es decir, llegar a las canchas y estadios de futbol, en los bares, en los grupos de atención al consumo de alcohol y otras adicciones, en los centros de salud, en la calle, en los espacios recreativos, en los centros de trabajo entre otros. Porque es ahí donde se encuentran los hombres.

Las reflexiones deben darse en torno de los usos y costumbres machistas que tanto hombres y mujeres tenemos y perpetuamos, puesto que es ahí donde surge la violencia que los hombres ejercemos en contra de las mujeres, en el caso de ellas han tenido que acostumbrarse a estas manifestaciones y de esta manera se naturaliza la violencia, dejando antecedentes para que otras violencias que tienen mayor impacto y que se presentan en menor medida vayan justificándose y que finalmente se tengan posturas sociales permisibles a las violencias incluso aquellas tan letales como el feminicidio.

El Instituto Politécnico Nacional, cuenta con una herramienta que nos ayuda a darnos cuenta de los niveles de violencia que los hombres ejercemos. Me refiero al caso del Violentometro (http://www.genero.ipn.mx/test/paginas/violent%C3%B3metro.aspx) que cuenta con una escala de cero a treinta en la que se distribuyen las violencias, estas van desde las bromas hirientes hasta el asesinato, lo que nos demuestra que las microviolencias son esas que más se presentan y las violencias extremas o letales se presentan en menor medida. Lamentable es la situación en nuestro estado en el que el feminicidio está alcanzando las cifras que derivaron en la primera Declaratorias de Alerta de Violencia de Género, imaginemos como estarán las cifras de las microviolencias.

Actualmente en Xalapa, contamos con dos propuestas para que los hombres de la región estén reflexionando la construcción de su masculinidad y a la vez la presencia de la violencia en sus cotidianidades, la primera de ellas es, “Hombres Responsabilizándose de su Vida” que sesiona los miércoles a las 18:00 horas en las instalaciones del Centro de Integración Juvenil de Xalapa, ubicado en la esquina que forman las avenidas Acueducto y Adolfo Ruiz Cortines, en la Colonia Unidad Magisterial, otra alternativa son los Grupos de Reeducación para hombres, que ofrece la secretaría de Salud de Veracruz, para participar les invito a que se acerquen al Centro de Salud Gastón Melo, Ubicado en Diego Leño No 2 BIS, Colonia Centro de la Ciudad Capital o llamar a los teléfonos 6 88 4182 o escribir a los correos electrónicos grupos.vfamiliar@gmail.com