PRESENTACIÓN DE LIBRO
“La Iglesia Tlaxcalteca de San Miguel de Aguayo de la Nueva Tlaxcala a través de los Siglos”, es un libro escrito por el investigador y abogado de profesión Marco Antonio Flores Jasso, quien afirma que esta obra nace con la idea de conocer la Historia de la Parroquia de Bustamante, Nuevo León, pueblo fundado por tlaxcaltecas en el año de 1686, ahora Parroquia de San Miguel Arcángel.
“De ahí la importancia de conocer sobre la Fundación y la Toma de Posesión de dicho Pueblo por los primeros pobladores tlaxcaltecas, así como de la fundación de la Iglesia, la cual fue construida a manera de ermita después de la toma de posesión del pueblo, quienes fueros sus protagonistas desde la antigüedad hasta la etapa contemporánea, los cambios que ha sufrido la Parroquia a través del tiempo”.
Resulta también interesante conocer los diversos Padrones o Censos levantados por los Curas o Párrocos sobre la población existente de Indios Tlaxcaltecas e Indios Alazapas nativos del lugar, en diversas épocas, y más importante aún, conocer sobre la historia del Santo Cristo que existe en la actualidad, llamado el Señor de Tlaxcala, sus orígenes, sus donadores, las fiestas, los milagros antiguos y del llamado Tricentenario de la Donación del Señor de Tlaxcala, pues bien todo lo anterior y algo más, se encuentra en esta obra literaria.
En su reciente visita a Tlaxcala, el abogado Marco Antonio Flores Jasso presentó su libro: «La Iglesia Tlaxcalteca de San Miguel de Aguayo de la Nueva Tlaxcala a través de los Siglos», en la sala de Juntas “Adrián Aguirre Benavides” de la Sociedad de Geografía Historia Estadística y Literatura de Tlaxcala, A. C. (SGHEL), donde destacó datos interesantes sobre el origen y la fundación de Bustamante quienes preservan su origen cultural, arquitectónico, gastronómico heredado de sus “Hermanos mayores, los tlaxcaltecas”.
Mediante una charla elocuente, el abogado Flores Jasso, transportó al público asistente a Bustamante, donde relató la forma de cómo los frailes franciscanos con apoyo de tlaxcaltecas llegaron a San Miguel de Aguayo donde se ofició la primera misa debajo de un árbol, junto con los primeros pobladores. La misa fue celebrada en el Ojo de agua del Cañón de Bustamante N. L.
Un año más tarde de la toma de posesión de los tlaxcaltecas (1687), van y le dicen a los frailes que del Cerro de enfrente del pueblo que se llama el cerro de Minas Viejas, hay unas piedras muy grandes que no saben de qué se trata, los tlaxcaltecos que ya vivían en Bustamante y los frailes que estaban en misión, van y le dicen a un buscador de minas que se llama Francisco Barbarigo, quien va y revisa las piedras y resulta que era plata, entonces a raíz de ahí empieza el auge de la plata en esta región.
Y bueno alguien de ahí pregunta los tlaxcaltecas de Bustamante de dónde venían o de donde llegaron, venían de Saltillo Coahuila como ustedes saben también fue fundado por tlaxcaltecas, bueno de San Esteban Saltillo se van dos o cinco familias, luego se van 20 y así sucesivamente pero lo primero que llamó la atención del porqué los tlaxcaltecas fundaron un pueblo ahí, pues seguramente porque lo vieron solo y despoblado.
En segundo lugar había agua, en Bustamante se encuentra un ojo de agua y que nunca se ha secado, entonces a los tlaxcaltecas y a los frailes les gusta ese ojo de agua y se funda el pueblo…, van llegando más familias y luego el descubrimiento de las minas, segundo atractivo, los tlaxcaltecas de nuestro pueblo antiguo eran todo, hacían todo, eran agricultores, ganaderos, mineros, milicianos o guerreros que combatían a los enemigos que no querían someterse a ellos.
DESCUBRIMIENTO DE LAS MINAS DE PLATA
Con el descubrimiento de las minas empiezan a llegar más familias y más familias de tlaxcaltecos a nuestro pueblo y claro la parroquia cada vez se va haciendo más grande y más grande conforme pasa el tiempo se crea un pueblo vecino a raíz del descubrimiento de la plata, que actualmente se llama Villaldama Nuevo León a 10 kilómetros de Bustamante.
Ahí se asienta la minera ya que ese pueblo era de españoles, y ahí los españoles empiezan a tener el control sobre esas minas, al principio eran los tlaxcaltecas los dueños de las minas, pero por cuestiones que desconocemos o malas administraciones, los tlaxcaltecas antiguos venden las minas a los españoles y crean el Real de Minas de San Pedro Boca de Leones que hoy conocemos como Villaldama Nuevo León, entonces estaban separados los tlaxcaltecas de los españoles por leguas o 10 kilómetros de los tlaxcaltecos de Bustamante.
Los tlaxcaltecos tenían privilegios por haberse aliado a los españoles, entre ellos el fundar pueblos donde solo hubiera puros tlaxcaltecos, que no hubiera españoles con ellos ahí viviendo y fue el caso de Bustamante. Bustamante siempre fue de puros tlaxcaltecos, los españoles están en otro pueblo y no dejaban que los españoles se asentaran en Bustamente, no los dejaban con el paso del tiempo, que pasaba con los alazapas naturales no los dejan vivir con ellos, los tenían viviendo a un lado del pueblo en un barrio, una calle y una acequia los tenían separados a los alazapas y a los tlaxcaltecos.
Con el paso de los tiempos en 1821 cuando ya se consolida la Independencia de México, los privilegios de los tlaxcaltecas ya se fueron acabando, se fueron mermando, los españoles comienzan a comprar propiedades en Bustamante y lógico compraban las mejores tierras porque donde había agua eran mejores tierras de las que había en Villaldama, y comienzan a tener sus propiedades, hay un padrón antiguo al principio son puros habitantes tlaxcaltecas y alazapas, pero ya los clérigos antes de la independencia ya mencionaban una lista de 5 o 6 españoles y decía el padrón lista de españoles arrimados.
Con tono de sarcasmo, señala el investigador “o sea, eran arrimados a los tlaxcaltecas, yo no entiendo cómo se habían asociado antes y como estaban separados, verdad, y luego había una rivalidad tremenda, yo no sé porque entre los españoles de Villaldama y los tlaxcaltecas de Bustamante, era una rivalidad de pleitos y todo eso, todavía a mí me todo ver eso, iban tlaxcaltecos de Bustamente a Villaldama y pleito seguro y viceversa, no obstante que había si la fundación por aquella asociación de ambos”.
La historia de la parroquia tiene relación con la historia de vida de los tlaxcaltecas a través de los siglos, en 1832 si mal no recuerdo – permítanme hacer un paréntesis y aclarar algo, yo no soy historiador, yo soy abogado pero me gusta investigar la historia, pero si cometo un error o una falla me corrigen ya que eso enriquece tanto mi presentación como el libro, además de gusta la historia, la historia de mi pueblo ligada con los tlaxcaltecas-.
En Bustamante se tienen vestigios materiales que viven ahorita, que se utilizan, tenemos vestigios culturales, gastronómicos y algo muy importante los vestigios humanos, mi papá se casó con una descendiente tlaxcalteca, mi abuelo también, entonces yo tengo sangre tlaxcalteca, y quiero mucho a Tlaxcala.
EL SEÑOR DE TLAXCALA
Tenemos al Señor de Tlaxcala, no negamos la cruz de nuestra parroquia, porque en el año de 1715 la india Ana María ya viuda de su esposo Bernabé García, que vivía en otro pueblo más distante, Sabinas Hidalgo. Deciden cambiarse de Sabinas Hidalgo, porque los españoles le querían quitar al cristo, la india Ana María le pide al obispo que le haga un documento en respaldo al cristo, que dice ese documento que declara a la India Ana María como dueña del cristo, ya Bustamante había sido fundado en 1686, la india cambia de residencia a San miguel Aguayo ahora Bustamante, donde al ver al cristo lo empiezan a venerar, entonces la india Ana María ya con avanzada edad hace un pacto con los tlaxcaltecos de Bustamente o de San Miguel de Aguayo, y les dice yo les regalo al cristo, lo dono pero con algunas condiciones, y bueno dicen los tlaxcaltecas cuales condiciones, meramente que me mantengan de por vida, con cuatro panelas de maíz además de que lo saquen en procesión por las calles, igualmente quiero que el cristo siempre esté aquí en la parroquia de san Miguel de Aguayo, y aceptan.
Se le conoce como el señor de Tlaxcala porque fue donado a un pueblo de Tlaxcala, es un cristo que desde la antigüedad ha hecho muchos milagros, es muy milagroso, en el norte del país, la religiosidad de la gente no es igual como las de acá, pues con este cristo es diferente, llega mucha gente de diferentes lugares a visitarlo.
Este cristo se sacaba por los caminos reales, por las provincias para pedir que lloviera, ya que aquí no es de mucha lluvia, lo sacaban en proceso alrededor del pueblo para que lloviera, los tlaxcaltecas batallaban para que lo regresaran los de Villaldama.
Una anécdota que recuerda Flores Jasso, fue que un día los de Sabinas Hidalgo, pidieron al cristo prestado, los convencieron para que se los prestaran y lo sacan en procesión al Cristo por los ranchos, por los caminos reales pidiendo la lluvia, en la noche se vino un aguacero tremendo, fue una verdadera inundación, dijeron los españoles de la época “se le paso la mano al Señor de Tlaxcala”.
Actualmente al señor de Tlaxcala ya no se le saca en procesión, como antes, un grupo de personas lo custodian y protegen, se le llama la Guardia del Señor de Tlaxcala, cuando hay fiesta, la guardia cierra la puerta del templo, lo bajan con andamios, para bajarlo hay entre ellos albañiles, lo bajan entre varios para salir en procesión, la figura la colocan en una tarima de madera, que le llaman el anda, y el mero 6 de agosto a las cuatro de la tarde, en plena canícula, en pleno calorón lo sacan por el pueblo al señor de Tlaxcala en procesión, llega mucha gente incluso llegan los que salieron del pueblo a vivir a otros estados.
Puntualiza el autor del libro, “Bustamante es un pueblo muy aguerrido, que les gusta las religiones, las tradiciones, aunque no les llegamos a ustedes ni a los talones” y anuncia que el 19 de marzo de 2023 va a ser el Carnaval en Bustamante, el carnaval tlaxcalteco, lo que es un ejemplo nada más de la identidad tlaxcalteca que nos une con Tlaxcala”.