EN MEMORIA DE ADRIÁN AGUIRRE BENAVIDES
POR: MA. ISABEL GÓMEZ
La Sociedad de Geografía, Historia, Estadística y Literatura de Tlaxcala A.C., conmemoró el pasado 8 de septiembre un aniversario más del natalicio del Gral. Adrián Aguirre Benavides, con una sesión solemne y pública, posteriormente se montó una guardia de honor en el busto de este personaje, y fue el maestro Rafael García Sánchez, consocio de la SGHEL Tlaxcala, quien dictó una conferencia sobre la vida y obra de Adrián Aguirre Benavides, quien donó su casa de descanso para la creación de la entonces Casa de la Cultura de Tlaxcala y por último, se entregó el reconocimiento Adrián Aguirre Benavides al licenciado Felipe Badillo Xilótl.
Rafael García Sánchez, destacó en su charla que Adrián Aguirre Benavides, “aunque nacido en Parras Coahuila, siempre se sintió consciente y orgulloso de sus orígenes tlaxcaltecas, y determinó la donación a la entonces agrupación cultural conocida como la Casa de la Cultura, que en realidad era la Sociedad de Geografía, Historia, Estadística y Literatura, nuestra casa, en la que hoy nos encontramos reunidos, institución que tiene apenas 75 años de haber sido creada, esto el 30 de julio de 1957”.
Dividida en dos partes, la plática versó primero con una breve reseña de la vida del general Adrián Aguirre Benavides, y la segunda parte, sobre una serie de pláticas y conferencias relacionadas con el llamado “mártir de la democracia”, don Francisco I Madero, esto hace 54 años, en las instalaciones de la SGHEL Tlaxcala.
ORIGEN Y PERSONALIDAD
El Gral. Adrián Aguirre Benavides nace el 8 de septiembre de 1879 en Parras de la Fuente, Coahuila, hijo de Rafael Aguirre Valadez y Jovita Benavides Hernández, fue el primero de nueve hermanos. Al nacer, sufrió un daño irreversible en el pie derecho, lo que lo obligó a tener que usar zapato ortopédico y bastón desde su infancia y por el resto de su vida.
En 1897 entró a la escuela nacional de jurisprudencia en la ciudad de México y se tituló de abogado el 3 de febrero de 1902, con la tesis: “Los derechos del hombre”. Empezó ejerciendo como tal con el sr. Francisco Madero y posteriormente con su hijo don Francisco I Madero.
De su primer matrimonio nacieron siete hijas. Profesionalmente inicia labores en Torreón, fue secretario del ayuntamiento y más adelante agente del Ministerio Público. En 1912, tras el triunfo de la revolución encabezada por Madero, fue elegido diputado federal, y tras el asesinato de Madero, durante la decena trágica, salió a Veracruz y de ahí a la Habana, y Nueva York, acompañando a la familia de Madero.
De regreso a México, estuvo estrechamente unido con don Venustiano Carranza, vuelve a ser diputado federal por el estado de Coahuila, al concluir su periodo legislativo, se dedicó al ejercicio de su profesión, radicando en Monterrey, Saltillo y el Distrito Federal. En 1947 se le otorgó la condecoración al Mérito Revolucionario.
En 1962 escribe el libro “historia de la revolución de 1910”, “Madero el inmaculado” como un homenaje al prohombre don Francisco I Madero. El 7 de octubre de 1964, el Senado de la República le otorga la presea Belisario Domínguez. Participa en publicaciones de algunos libros junto con su hermano.
El 24 de agosto de 1968, dicta la conferencia sobre Francisco I Madero el inmaculado, donde destaca que fue un hombre de excepcional cualidad y calidad humana, que a pesar de poseer su familia inmensas ventajas de que gozaban los hacendados de entonces, él tenía especial preferencia por la clase social desprotegida, como podrían ser los campesinos y peones. Cuatro meses después de dar esta conferencia, don adrián fallece el 29 de diciembre de 1968.
Precisó Rafael García Sánchez, que ésta fue la primera conferencia formal que se dio en este espacio, aún como propiedad del sr. Aguirre Benavides por él mismo, y recordó que fue un sábado 24 de agosto de 1968, es decir hace 54 años.
García Sánchez, puntualiza “sirvan esas breves líneas, para decir gracias a través del tiempo y del espacio a la ilustre memoria del general Adrián Aguirre Benavides, pilar de la cultura en Tlaxcala, por ese noble gesto de ver a futuro y apoyar las causas culturales y a partir de su determinación y más concretamente de su lamentable fallecimiento físico, su memoria sigue y seguirá viva mientras tengamos la capacidad de ser agradecidos”.
La Lic. Irma Carolina Romero, secretaria del Consejo Directivo de la SGHEL, explicó que el año pasado la Sociedad tuvo a bien crear el reconocimiento “Lic. y Gral. Adrián Aguirre Benavides”, el cual se ha destinado para personas que se distinguen en su quehacer en bien de la nación, en la ciencia, la cultura y todo tipo de aportaciones que engrandecen a nuestra patria chica que es Tlaxcala. El año pasado el primer reconocimiento se otorgó al Gral. Juan Daniel Lara Capuchino, y en esta ocasión el galardonado es el Maestro en Derecho Felipe Badillo Xilótl, reconocimiento que fue entregado por el presidente de la SGHEL Tlaxcala, José Cruz Omar Zacatelco Sánchez.
Dentro de sus méritos se destacan sus estudios en filosofía, licenciado en derecho, estudios en maestría en derecho constitucional y amparo, criminalística y criminología, maestro de filosofía del derecho en diversas universidades, maestro de amparo, sociología jurídica. Juez penal de Tlaxcala, subprocurador de justicia, procurador general de justicia del estado de Tlaxcala, entre otros cargos públicos más.
En su mensaje, el galardonado Felipe Badillo, habló sobre las nuevas leyes que se analizan en el Congreso de la Unión, la discriminación que aún vive de la mujer tanto política como socialmente, por el exceso de machismo en el país, entre otros fanatismos más que se viven actualmente, “solo la cultura puede destruir esos extremismos, dado que es ella la creadora de verdaderos valores que hacen posible la tolerancia y el respeto necesarios para la unificación de las sociedades”.
Agregó “de ahí, la enorme importancia que tienen las instituciones como la Sociedad de Geografía Historia, Estadística y Literatura del Estado, que se encuentra inmersa en esta noble tarea de hacer mejor la coexistencia entre los seres humanos, en ese contexto creo que el único fanatismo que vale la pena, es el fanatismo por la cultura, que nos abre los ojos para pensar con cerebro propio no con el de los demás, tal proceder propiciará tener la libertad para decidir con conciencia nuestras actuación en todos los campos de la actividad humana, política, religiosa económica social etc., sin hacerlo por lo que otros decidan”.
Por último invitó a todos los presentes a que nos fanaticemos por la cultura, y emitió un reconocimiento especial a Gral. Adrián Aguirre Benavides, de quien fue motivo esta reunión.
Al término de la sesión, hizo uso de la palabra el Gral. Juan Daniel Lara Capuchino, quien exhorto a los presentes a ser difusores, que propague que existe en Tlaxcala, una SGHEL y esta merece la inclusión de todos y cada uno de los tlaxcaltecas no importando el género, la situación de carácter económico, político, religioso, o apasionamiento político, sino que se pregona y se difunde la cultura en todos sus ámbitos y declamó “Quiero ser como tú”.
