Perspectiva

PORQUE SOMOS MUY HOMBRES.

Ser hombre, es toda una trayectoria que inicia con el nacimiento de una persona que cuenta con características especificas en su composición corporal, esto determinará las formas en que será tratado, las actividades que se le permitirán y asignarán, así como las que le favorezcan y se espere que realice, dejando fuera todo aquello que no le genere confort y posicionamiento entre otros hombres, es así que los niños no se acercan a las actividades de niñas, puesto que se considera que las mujeres son débiles y dependientes.

Es verdad que a través de la lucha de las mujeres y de la incorporación de la visión feminista, se ha logrado llegar a una transformación de las estructuras sociales en la que las mujeres hoy en día cuentan con mayores oportunidades para el acceso a sus derechos y los hombres nos acercamos a cambios que favorecen las relaciones igualitarias, Sin embargo, aún hay un gran trecho por recorrer, una tarea pendiente que tenemos los hombres, es reconocer qué las formas tradicionales de masculinidad van perdiendo vigencia debido a la constante transformación social y que de perpetuarlas nos estamos resistiendo un proceso transformador que busca generar cambios en los elementos esenciales de toda sociedad, las personas.

Los hombres ciertamente aprendemos con el pasar del tiempo que en nosotros recaen un gran número de expectativas que van determinando nuestro desarrollo y desempeño, al grado de convertirse en una carga excesiva que nos afecta profundamente, esto aunado al espíritu competitivo que han dicho que nos caracteriza, nos lleva a no confrontar y a querer demostrar que podemos con eso y más, porque somos muy hombres.

Definitivamente los procesos sociales encaminados a la construcción de la igualdad, nos ponen de frente con la posibilidad de generar nuevas formas de construir masculinidades en las que los hombres podemos sumarnos a actividades que antes se consideraban exclusivas para las mujeres y viceversa, esto no lo hemos logrado puesto que representa dejar ciertos privilegios que nos colocan en situaciones de comodidad, toda transformación tiene costo, es por eso que el acompañamiento es esencial, en la medida que los hombres construyamos diálogos y redescubramos nuevas formas de ser, podremos contribuir a la transformación y evolución social.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *